29.5.10
El mundo líquido de Bauman
“En algún punto del camino hacia el libre comercio global, la función dadora de sentido de la comunidad nacional cayó por la borda, y los individuos han quedado solos, obligados a lamerse sus propias heridas y a exorcizar sus miedos en soledad y aislamiento”
Zygmunt Bauman
Zygmunt Bauman
No recuerdo muy bien cómo llegué hasta Bauman. Pero el primero de los libros que llegó a mis manos está fechado en junio de 2003 y en Madrid. Es lo bueno que tiene anotar las fechas y los lugares donde compro los libros. Luego te ayudan a recordar, te ayudan a trazar tu biografía a través de los títulos que has ido leyendo.
Era “Comunidad. En busca de seguridad en un mundo hostil” publicado por Siglo XXI. Supongo que en aquellos momentos estaba revisando diferentes perspectivas y visiones de la comunidad para preparar la ponencia que tenía que dar en Granada en el marco de aquellas Jornadas de Terapia Ocupacional que organizaba APETO y que fueron tan significativas. Es curioso, últimamente he estado recuperando muchos de los libros (y, por tanto, de las ideas) sobre las que uno había estado dando vueltas hace unos cuantos años. Hace un par de meses me veía desempolvando mis viejos libros de Leonardo Boff para hablar en clase de la perspectiva ecológica. Hay ideas que son hoy más necesarias que nunca y las de Bauman lo son.
En ese 2003, uno pensaba y copio del texto de aquella ponencia “que frente a los discursos habituales planteados desde la rehabilitación psicosocial, en general, y por la terapia ocupacional, en particular, surge una visión de la realidad menos optimista pero probablemente más centrada en el desarrollo actual de la sociedad, ya que tal como indica Bauman (2003) el siglo pasado constituyó el siglo de “las grandes dislocaciones, desligamientos, desintegración y desarraigo (así como de los desesperados intentos de religamiento, reintegración y rearraigo)”.
Se nos pide que busquemos soluciones biográficas a contradicciones sistémicas (Bauman, 2003), pese a esto, creemos en las posibilidades reales que nos ofrece la ocupación como eje para intervenir en, desde y con la comunidad y por lo tanto debemos intentarlo.”
Hoy mis ideas no se han alejado mucho de lo que decía en ese momento. Más bien se han visto reforzadas por la convicción en el poder transformador de la ocupación.
Me alegro que Bauman haya sido galardonado con el Premio Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades 2010 junto con Alain Touraine, del que he leído bastante menos. Lo siguiente es lo que ha dicho de ellos el jurado de estos dos intelectuales tan necesarios:
"Alain Touraine, historiador y sociólogo francés, es autor de trabajos fundamentales sobre la sociedad post-industrial que han permitido entender e interpretar el sentido profundo de las grandes transformaciones de nuestra época, ofreciendo a la vez una reflexión continua y enriquecedora acerca de los problemas derivados de una convivencia necesaria por encima de las diferencias humanas.
Por su parte, Zygmunt Bauman, de origen polaco y nacionalidad británica, sociólogo y profesor universitario en distintos países, ha estudiado a fondo la condición social del hombre postmoderno en un mundo inestable y de valores perecederos. En su decisivo análisis de esta realidad, Bauman ha acuñado el término de “modernidad líquida”, agudamente desarrollado en su obra homónima."
Por cierto, muy recomendable el post de Valera: La solidez de Zygmunt Bauman.
Era “Comunidad. En busca de seguridad en un mundo hostil” publicado por Siglo XXI. Supongo que en aquellos momentos estaba revisando diferentes perspectivas y visiones de la comunidad para preparar la ponencia que tenía que dar en Granada en el marco de aquellas Jornadas de Terapia Ocupacional que organizaba APETO y que fueron tan significativas. Es curioso, últimamente he estado recuperando muchos de los libros (y, por tanto, de las ideas) sobre las que uno había estado dando vueltas hace unos cuantos años. Hace un par de meses me veía desempolvando mis viejos libros de Leonardo Boff para hablar en clase de la perspectiva ecológica. Hay ideas que son hoy más necesarias que nunca y las de Bauman lo son.
En ese 2003, uno pensaba y copio del texto de aquella ponencia “que frente a los discursos habituales planteados desde la rehabilitación psicosocial, en general, y por la terapia ocupacional, en particular, surge una visión de la realidad menos optimista pero probablemente más centrada en el desarrollo actual de la sociedad, ya que tal como indica Bauman (2003) el siglo pasado constituyó el siglo de “las grandes dislocaciones, desligamientos, desintegración y desarraigo (así como de los desesperados intentos de religamiento, reintegración y rearraigo)”.
Se nos pide que busquemos soluciones biográficas a contradicciones sistémicas (Bauman, 2003), pese a esto, creemos en las posibilidades reales que nos ofrece la ocupación como eje para intervenir en, desde y con la comunidad y por lo tanto debemos intentarlo.”
Hoy mis ideas no se han alejado mucho de lo que decía en ese momento. Más bien se han visto reforzadas por la convicción en el poder transformador de la ocupación.
Me alegro que Bauman haya sido galardonado con el Premio Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades 2010 junto con Alain Touraine, del que he leído bastante menos. Lo siguiente es lo que ha dicho de ellos el jurado de estos dos intelectuales tan necesarios:
"Alain Touraine, historiador y sociólogo francés, es autor de trabajos fundamentales sobre la sociedad post-industrial que han permitido entender e interpretar el sentido profundo de las grandes transformaciones de nuestra época, ofreciendo a la vez una reflexión continua y enriquecedora acerca de los problemas derivados de una convivencia necesaria por encima de las diferencias humanas.
Por su parte, Zygmunt Bauman, de origen polaco y nacionalidad británica, sociólogo y profesor universitario en distintos países, ha estudiado a fondo la condición social del hombre postmoderno en un mundo inestable y de valores perecederos. En su decisivo análisis de esta realidad, Bauman ha acuñado el término de “modernidad líquida”, agudamente desarrollado en su obra homónima."
Por cierto, muy recomendable el post de Valera: La solidez de Zygmunt Bauman.
Etiquetas: Libros, Terapia Ocupacional