9.3.09
Ander
Ander, dirigido por Roberto Castón, es el primer largometraje realizado en euskera que aborda la situación de la homosexualidad en el contexto rural y ha sido impulsado y financiado, en su mayor parte, por Berdindu, el Servicio Vasco de Atención a Gays, Lesbianas, Bisexuales, Transexuales e Intersexuales.
Estrenada hace poco más de un mes en la última edición de Zinegoak, el Festival Internacional de Cine Gay-Lesbo-Trans de Bilbao. Logró en Berlín el premio de la Confederación Internacional de Cines de Arte y Ensayo, CICAE, uno de los jurados independientes de la Berlinale.
Me atraen las películas que cuentan historias distintas, que se acercan a personas cotidianas, de carne y hueso. Ander es uno de esos trabajos que no sólo se centran de manera pesada en la cuestión de la homosexualidad. Si no que se acerca a otras muchas cuestiones. Me gustan sus silencios incómodos. Me gusta como refleja la presión del entorno, de la familia, del jodido miedo al qué dirán (que como dicen en un determinado momento de la película a todos nos importa). Me gusta cómo se habla con honestidad y sinceridad de las cosas que se sintieron pero no se dijeron, de las oportunidades perdidas, de los trenes que se dejaron pasar, de las decisiones que no se tomaron en el momento adecuado, de la lucha por la felicidad y por ser uno mismo.
En una entrevista en la prensa le preguntaban a Pilar Rodríguez, que interpreta a la madre del protagonista:
- “Ander” no es sólo sobre la homosexualidad, ¿verdad?
- Es sobre la soledad. De todos.
Estrenada hace poco más de un mes en la última edición de Zinegoak, el Festival Internacional de Cine Gay-Lesbo-Trans de Bilbao. Logró en Berlín el premio de la Confederación Internacional de Cines de Arte y Ensayo, CICAE, uno de los jurados independientes de la Berlinale.
Me atraen las películas que cuentan historias distintas, que se acercan a personas cotidianas, de carne y hueso. Ander es uno de esos trabajos que no sólo se centran de manera pesada en la cuestión de la homosexualidad. Si no que se acerca a otras muchas cuestiones. Me gustan sus silencios incómodos. Me gusta como refleja la presión del entorno, de la familia, del jodido miedo al qué dirán (que como dicen en un determinado momento de la película a todos nos importa). Me gusta cómo se habla con honestidad y sinceridad de las cosas que se sintieron pero no se dijeron, de las oportunidades perdidas, de los trenes que se dejaron pasar, de las decisiones que no se tomaron en el momento adecuado, de la lucha por la felicidad y por ser uno mismo.
En una entrevista en la prensa le preguntaban a Pilar Rodríguez, que interpreta a la madre del protagonista:
- “Ander” no es sólo sobre la homosexualidad, ¿verdad?
- Es sobre la soledad. De todos.